
Eibar, 1930. En un pequeño taller lleno de esfuerzo y ambición, siete hermanos se unieron para construir algo especial. No se trataba solo de fabricar herramientas, sino de crear un legado de calidad y dedicación.
Así nació Bueno Hermanos, un taller donde cada día, con sus propias manos, estos hermanos transformaban el metal en tijeras y alicates, herramientas diseñadas para durar y superar las expectativas de quienes las usaban.
La relación entre los hermanos era el motor de su éxito. Cada uno aportaba algo único: habilidades, ideas y una visión compartida de calidad y servicio. Trabajaban codo a codo, inspirándose mutuamente y compartiendo el deseo de que cada producto que saliera de su taller reflejara su dedicación y compromiso.

El Viaje a Logroño: Un Nuevo Comienzo
A medida que el taller crecía, los hermanos se dieron cuenta de que necesitaban un espacio que estuviera a la altura de sus sueños. En 1963, decidieron trasladarse a Logroño, donde su visión de crecimiento y modernización podría hacerse realidad. Allí, Bueno Hermanos floreció.
La fábrica de Logroño se convirtió en un centro de innovación y producción, pero siempre mantuvo la esencia del taller en Eibar, con el mismo compromiso y respeto por el oficio que los había guiado desde el principio.
Una Herencia de Calidad y Confianza
Aunque el tiempo ha pasado, en Bueno Hermanos seguimos siendo fieles a la visión de aquellos siete hermanos. Cada tijera y alicate que fabricamos es un tributo a su legado y a la relación de confianza que construyeron con sus clientes.
Nos guía la responsabilidad de ofrecer productos de la más alta calidad, con el mismo espíritu que aquellos hermanos forjaron desde el primer día.

Un Futuro Basado en Nuestra Historia: La Calidad como Pilar Fundamental
Desde aquellos primeros días en Eibar, la calidad ha sido el principio rector de Bueno Hermanos. Los siete hermanos fundadores sabían que cada tijera y cada alicate que salían de su taller representaban no solo a su empresa, sino también a ellos mismos, a su dedicación y al nombre que querían construir. Esta determinación de ofrecer siempre lo mejor sigue viva en cada producto que fabricamos hoy.
Nuestra fábrica en Logroño combina tecnología avanzada con un saber-hacer perfeccionado durante generaciones. Cada tijera, cada cuchillo y cada herramienta que creamos pasa por un proceso meticuloso de diseño, selección de materiales y control de calidad. Sabemos que el profesional que confía en Bueno Hermanos busca precisión, durabilidad y confort, y es nuestra misión cumplir con estas expectativas en cada detalle. Innovamos, no solo para crear productos nuevos, sino para elevar el estándar de lo que significa calidad.
La calidad para nosotros no es solo una característica; es un compromiso integral que va desde la selección de los materiales más resistentes hasta los rigurosos controles finales que garantizan que cada pieza cumpla con nuestras exigencias y las de nuestros clientes.
Calidad que Evoluciona, Esencia que se Mantiene
En Bueno Hermanos, la calidad no es estática. Evoluciona con cada nuevo reto, cada cliente y cada avance tecnológico. Incorporamos tecnología de vanguardia y procesos de mejora continua para asegurar que cada herramienta sea una extensión perfecta de la mano de quien la utiliza.
Pero aunque la tecnología y los procesos cambian, lo esencial sigue siendo el mismo compromiso de aquellos siete hermanos: ofrecer herramientas que acompañen al profesional en su trabajo, con la máxima confianza en su precisión y durabilidad.

Nuestro Compromiso para el Futuro
La historia de Bueno Hermanos es una promesa de calidad que trasciende generaciones. Cada herramienta es un reflejo de nuestro respeto por el oficio y de nuestro compromiso con quienes nos eligen. Miramos al futuro con la misma responsabilidad que nuestros fundadores, entendiendo que en cada producto que fabricamos llevamos una parte de nuestra historia y nuestro nombre.
Nos aseguramos de que cada herramienta que creamos hoy esté a la altura de las expectativas de quienes confían en nosotros y de las generaciones que seguirán confiando en nuestra calidad.
Un Mensaje de los Fundadores
Si los hermanos pudieran hablar hoy, mirarían con orgullo la empresa que construyeron. Bueno Hermanos sigue siendo su sueño hecho realidad: una empresa que respeta sus raíces, innova constantemente y mantiene su compromiso de fabricar herramientas excepcionales que acompañan a sus usuarios en cada tarea.